Evolución del bridal look a lo largo de la historia del maquillaje
Una novia siempre es el centro de atención principal en una boda. Su vestido, su velo, su peinado y su maquillaje de novia, son los principales detalles para hacer del momento del “si quiero”, algo inolvidable. Una novia hermosa, cuidadosa de cada detalle, es un regalo a la vista para todos quienes acompañen a la pareja que contrae nupcias.
Desde que las mujeres de todas las culturas del mundo, usan el maquillaje para embellecerse, el maquillaje de novia ha sido uno de los más trabajados a la hora de realizarlo, pues se busca que la novia, en su gran día, sea la mujer más hermosa.
El maquillaje de novia ha venido evolucionando y actualizándose durante cada período y época de la humanidad. Si bien es cierto que cada bridal look debe seguir diversos cánones de belleza obligatorios, como lo es la personalidad, los gustos, edad y elección del look de cada novia, éstos siempre se enmarcan en tendencias sociales y de vanguardias vigentes según la época y la estación. Y, hasta la hora del día y el lugar en que se va a celebrar la boda, influyen en él.
A lo largo del tiempo, el bridal look ha estado evolucionando de manera constante. En estos pocos párrafos, te explicaremos cómo ha venido evolucionado el maquillaje de novia a lo largo de las décadas del siglo XX y lo que va del siglo XXI, en los que ha venido protagonizando y abriéndose paso en el maquillaje social.
Maquillaje de novia los años 1920/1940
El maquillaje de novia de los años de post guerra es el que más ha sellado un antes y un después en la industria cosmética. Aunque el bridal look era un maquillaje casi ausente, éste comenzó a tomar auge cuando el labial hizo aparición. Las barras labiales se comenzaron a usar en esta época, siendo un desafío ante esa sociedad que venía de convencionalismos y modestias antiguas. Cejas finas, ojos bien delineados, pómulos sonrosados y labios en colores rojos y brillantes, eran indispensables para el maquillaje de novia de esta época.
Maquillaje de novia Años 1950/1960
El maquillaje de novia de la década de los años 50 y 60, se centraba en la parte superior del rostro: los ojos eran los protagonistas; sus tonos se dirigían a los turquesas y rosa pastel, con un delineado ancho en tono negro sobre el parpado superior. Las pestañas bajaron un poco su volumen, pero continuaban siendo espesas, haciéndolos más expresivos y profundos, denotando grandeza en la mirada. Se empezaba a reflejar el estilo hippie, pues era el estilo de moda que empezaba a despuntar. Los pómulos y los labios pasaban a segundo plano, siendo los colores neutros los elegidos por las novias para sellar su look.
Maquillaje para novias Años 1980/1990
Época de las ostentaciones y los lujos, en éstos años estuvieron de moda los vestidos sobrecargados, velos con suficientes brillos y pedrería. El maquillaje de novia lucía sobrio, perfectamente delineado, labios en tonos neutros y con poco color. Los ojos pasaban casi desapercibidos pues las sombras se usaban en tonos suaves que dibujaban todo el párpado, aunque algunas osadas llegaron a usar la paleta de colores que se usaban para el maquillaje social. Las grandes melenas también debían lucir, un ejemplo de ello sería la emblemática boda de la princesa Diana, la alta costura comenzaba a mostrarse y toda la atención estuvo dirigida en las grandes dimensiones de sus vestidos más que en el maquillaje.
El nuevo milenio y sus constantes cambios con el maquillaje para novias
El año 2000, época en la que la tecnología comenzó a tomar presencia, impuso retos y tendencias en los maquillajes, sin embargo, el maquillaje de novia en este nuevo milenio, conservó su sobriedad. El rostro se muestra natural, los colores tierra son los reyes del maquillaje de novia, por toda la naturalidad y frescura que aportan al rostro, pudiendo ser usados casi por cualquier tono de piel. Debido a que los ojos suelen ser protagonistas en las bodas elegidas para la noche, las pestañas postizas tomaron un nuevo lugar en el maquillaje de novias para quienes son esenciales, a fin de otorgarle profundidad y belleza a la mirada. Las cejas se vuelven mas gruesas y naturales, y sin embargo se busca que estén perfectamente delineadas. Rosas y corales se usan en los pómulos y en los labios.
En el nuevo siglo, los maquillajes creados para una boda al aire libre y en el día, tienden a ser más claros y naturales; pues el brillo natural de la piel se deja ver y, según el gusto de la novia, pueden elegirse para bodas nocturnas también.
En la historia del maquillaje de novia, existen diferentes técnicas para su aplicación, pero siempre cumplen la misma función: embellecer el rostro femenino, mostrar sus atributos y complementarlos con el cabello y el vestuario, a fin de que en conjunto la novia luzca totalmente perfecta y en armonía con el entorno.
El maquillaje de novia ha sido y será el complemento exclusivo de cualquier mujer en uno de los momentos más importantes de su vida: su boda, miles de años atrás, se ha hecho todo lo posible por destacar la belleza de la novia, debido a que lleva intrínseca la pureza que va a entregar, y que se presente ante el altar hermosa y radiante es el primer regalo que le ofrenda a su futuro esposo y a todos quienes los acompañen en tan especial ocasión.
Maquillajes de novia reales durante la historia para no olvidar
Las novias reales siempre lucen impecables en los días de su boda y forman parte de la historia del maquillaje. Ello no nos sorprende, considerando que cuentan con la ayuda de talentosos maquilladores y peluqueros.
Con cientos de ojos puestos en ellas, la duquesa de Cambridge, la princesa Eugenia y más quieren verse y sentirse lo mejor posible.
La Princesa de Gales, marcó un antes y después en la historia del maquillaje
Lució su cabello en ondas elásticas, cortesía de Kevin Shanley, mientras que su maquilladora Barbara Daly agregó un toque de delineador de ojos para resaltar sus ojos azules y lo remató con una piel impecable y labios rosados naturales. Sin embargo, más tarde reveló que Diana sufrió un percance con su perfume minutos antes de caminar por el pasillo, dejando una mancha en su vestido de novia de David y Elizabeth Emanuel.
Princesa Eugenia y su maquillaje de novia
Ella reclutó a la maquilladora Hannah Martin de Bobbi Brown para crear su estilo de maquillaje natural de rosas inglesas para su gran día, con mejillas sonrosadas, sombra de ojos bronce y cejas llenas y atrevidas. Mientras tanto, su cabello estaba arreglado en un moño bajo con algunos mechones sueltos para enmarcar su rostro.
¿Qué otras princesas han marcado historia para tí? Déjalo en los comentarios.